El pasado 15 de abril un gol de Plà en el
descuento permitía al Gavà sumar un punto que acercaba la permanencia,
sobretodo porque dejaba a su oponente, L’Hospitalet, al borde del descenso.
Aquel día el equipo hizo un mal partido ante un Hospi que se jugaba muchísimo y
que acabó con 9, y el entrenador del Gavà salió enfadadísimo a la rueda de
prensa.
“Vestimos de azulgrana pero no somos el Barça”
dijo a los medios. El técnico lamentó que con la situación que durante todo el
año había atravesado el equipo hubiese gente increpándole, pidiendo que tirase
el equipo arriba. Aunque suene contradictorio ese ha sido el gran mérito de
Óscar Mena en Gavà y no solo la permanencia, una consecuencia del buen trabajo realizado. En
octubre, noviembre, o diciembre, cuando el equipo estuvo a punto de verse
obligado a retirarse de la competición, parecía imposible que en abril La
Bòbila volviera a hablar de futbol y a exigir un cierto nivel de juego en la
búsqueda de una salvación deportiva en la que nadie confiaba.
Mena pasó un mal trago frente a L'Hospitalet. Foto: Álex Gallardo |
Si no hubiese sido por Óscar Mena, como los
mismos protagonistas han reconocido, la reacción de los jugadores con ficha
profesional hubiese sido muy probablemente acogerse a la normativa que les
permitía quedar libres, y el Gavà hubiese sido expulsado de la competición por
no cumplir la normativa de contar con 8 fichas profesionales. No acaba ahí la
tarea de psicólogo de Óscar Mena, pues fue capaz de recuperar y guiar
anímicamente a un equipo en el que ha pasado de todo, incluyendo en ese “todo”
las cosas que se han ido conociendo, y las que no han llegado a trascender.
Mena dirigiendo al Gavà desde la grada junto a su ayudante Carucha, luego reemplazado por Pirri. Foto: Álex Gallardo |
Desde que Maniega ocupa la presidencia se ha
hecho habitual escuchar entrevistas y ruedas de prensa de los técnicos, como
Toni Llebaria o Albert Poch en su día, denunciando la situación y defendiendo a
su plantilla, pero el envidiable nivel de libertad al que ha llegado Óscar Mena
a la hora de expresar lo que pensaba, sea por su situación, o por ser quién (o
cómo) es, no lo habíamos visto nunca.
Mena llegó a La Bòbila a finales de
septiembre, como él mismo ha repetido en diversas ocasiones, engañado. Se
anunció su fichaje cuando a Pons siquiera le habían notificado el despido, y
pese a un primer amago de marcha -parado por los jugadores- debutó en Cornellà
con un contundente 0-4. Fue el primero de los 11 partidos que tuvo que dirigir
desde la grada, además de otro (ante el Sabadell) en el que el técnico se
marchó a Madrid a modo de ultimatum. Finalmente, en la jornada 16, Mena pudo
sentarse en el banquillo… aunque cobrar por ello sería otro cantar.
Mena se midió a otro exjugador de primera, Tevenet, con apenas 12 jugadores del primer equipo. Foto: alicanteplaza.es |
Como entrenador Óscar Mena ha dirigido 32
partidos (desde la grada, o desde el banquillo), cosechando 13 victorias, 7
empates, y 12 derrotas, con una media de 1,43 puntos por partido. Sus números
como local son especialmente buenos (9V – 3E – 4D), con un 56,25 % de victorias
que supera con creces al de su predecesor Juanma Pons (43,75%). El juego
exhibido se ha basado en explotar las características de la plantilla con la
que ha contado, buscando rápidamente a los dos hombres de referencia arriba y
la rapidez de las alas a la hora de desplegarse en ataque.
Durante la temporada Mena ha sabido corregir
ciertos aspectos y debilidades claves en 2ªB, como la fragilidad a la hora de
defender el segundo palo en las jugadas de estrategia, o las dificultades para
mantener un marcador favorable, pues hasta en 9 ocasiones el Gavà se avanzó en
el marcador y no acabó ganando. La evolución fue evidente, el equipo encajó tan
sólo 2 goles en los últimos 8 partidos de liga.
Lo que no necesitó de evolución fue su papel
como líder y pegamento para lograr que el vestuario fuese una piña. Sus
anécdotas, sus consejos, sus bromas, o su mano dura cuando hizo falta, marcaron
a una plantilla que no se cansó de elogiarlo. La celebración de uno los goles
de Boris ante el Atlético Saguntino junto a técnico y plantilla, o el fin de
semana de toda la plantilla en casa de Mena en Madrid cumpliendo la promesa por
la permanencia, hablan por sí mismas.
Mena celebrando desde su "banquillo" tras vencer al Lleida. Foto: Álex Gallardo |
Todas estas virtudes no afectan a la
continuidad del técnico, sentenciada desde hace meses. Ni la junta directiva cuenta
con él (renovar un entrenador que te ha puesto de vuelta y media semana sí y
semana también no es muy habitual), ni el que era/es? director deportivo Mario
Barri lo veía encabezando su proyecto, tal y como confesó el propio Mario Barri
en el Marcador de Radio Gavà. Óscar Mena no continuará como entrenador del Gavà.
Hoy el diario Última Hora Mallorca le señala como
una de las opciones que baraja el Atlético Baleares para ocupar su banquillo la
temporada próxima. Veremos si el técnico argentino, que como jugador tuvo una
destacada trayectoria en Mallorca, es finalmente el elegido. Lo sea o no, desde
Gavà se le debe algo más que dinero (no cobra desde enero); agradecimiento.
Lo echaremos de menos! Gracias por todo Oscar!
ResponderEliminarGrande Mister! Se echará de menos dirigiendo pero también encontrarte por las calles de Gava para conversar con cualquiera que te paraba. Nuestro Cholo particusar. .. Gracias y mucha suerte!
ResponderEliminarYo quiero agradecer a oscar mena por el gran trabajo que ha realizado en el equipo y fuera una persona con carácter y dice lo que piensa le deseo lo mejor donde este y lo recordaré siempre un amigo suerte y muchas gracias.
ResponderEliminar