Seguir vivos en la última jornada de liga seguramente no entraba en la calculadora de mucha gente, pero estos chicos lo han conseguidos. Cinco victorias en los últimos seis partidos, más que en todo el resto de liga, acercan al Gavà a una permanencia que sonaba a imposible, aunque queda pendiente el paso más grande.
Ayer frente a la EF Gironés, un equipo que demostró el por qué de su cómoda clasificación, el Gavà realizó un partido notable, haciendo lo necesario para marcar en la primera parte, manteniendo la concentración defensiva durante la segunda. Guiados por un Pau Mañé que ha llegado a este tramo final a un nivel extraordinario, los gavanenses tuvieron ocasiones para adelantarse en el marcador, pero no lo lograron hasta que superada la media hora de juega, una asistencia de Jaraba para Ferrán la convertía éste en el 1-0.
Pau Mañé fue una pesadilla para sus defensores. Foto: Rafa Esteve |
Superados unos minutos de zozobra en los que la EF Gironés dio un paso adelante, el Gavà intentó contemporizar sin mucho éxito hasta el descanso. En la reanudación los visitantes buscaron con ahínco el empate, comandados por su capitán Ridao que generó mucho peligro por la banda izquierda, pero el Gavà no hizo ninguna concesión e incluso en un par de acciones puntuales pudo ampliar la renta, con sendos disparos a la madera de Ferrán y Pau Mañé.
Gavà: Kilian, Chacón, Pau Punzano, Ricard, Arnau, Javi Gallardo, Jaraba (Monfort 82'), Espi, Pau Mañé (Fabra 88'), Acedo (Chechi 65'), Ferrán (Gudjohnsen 75').
EF Gironés: Marc Solé (Jonathan 45'), Toribio (Plaja 65'), Abde (Vergara 45'), Mas, De Quintana, Guillem, Biel, Pau (Marouan 45'), Devia (Nico 57'), Ridao, Yaya.
Goles: 1-0 Ferrán (36').
Mollet y L'Hospitalet, dos rivales directos por la permanencia aún deben jugar sus partidos de esta semana, que dictaminarán la posición desde la que afrenta el Gavà una última jornada en la que está obligado a ganar, precisamente en campo del Mollet.
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