Gavà 2 - 1 Gramenet

Y la fiesta fue completa. Apoteósica victoria por fin en la Bóbila de un equipo y una afición que merecían el gol de Dani Guerrero cuando el partido ya agonizaba.

Y eso que en el minuto 1 los fantasmas del presente acechaban el ánimo de la grada con una gran ocasión de la Grama, que sin embargo a partir de ahí se ausentó del partido durante un cuarto de hora. Un espacio de tiempo en el que Manteca volvió literalmente loca a la defensa de la Grama, ejemplificada en la figura de Rezzonico, convertido en un juguete para el delantero de Begues. Tanto le insistió el delantero, presionando, robando, ganándole en carrera.. que el propio Rezzonico acabó metiéndose el primer gol en propia puerta.

El 1-0, la primera vez que el Gavà se pone con ventaja en el marcador como local en esta liga, espoleó a la Grama, que entre los minutos 18 y 30, apretó con fuerza al Gavà, si bien únicamente creaba peligro en jugadas a pelota parada colgadas al área y un buen movimiento del díscolo Pedro García, que cuando más fácil lo tenía chutó al centro de la portería para el lucimiento del guardameta. De hecho, Marcos no tuvo que ofrecer ninguna palomita de las suyas hasta el 40 de la primera parte, en un chut desde la frontal que desvió a corner.

Durante el último cuarto de hora de la primera parte el Gavà le tomó de nuevo el ritmo al partido, maniatando el centro del campo de la Grama y enviando rápidamente balones a Manteca, que seguía ganando la partida a los centrales colomenses. Pudo llegar el segundo para los locales, pero no fue así, y cuando la primera parte excedía de sobras el tiempo marcado, un error de Marcos al intentar atajar un balón, dejaba el balón suelto en el área pequeña para que el más desafortunado de su equipo, Rezzonico equilibrara la balanza de goles (y favores).

Si alguien creía que ese gol iba a romper al equipo, se equivocaba. El Gavà salió irreconocible en la segunda parte, ofreciendo de largo los mejores minutos de lo que va de temporada, ante una Grama aturdida que se veía incapaz de contener el juego de los de Jaume Bonet, que llegaban relativamente fácil al área, pero que se apagaban cuando llegaba el momento de buscar portería.

La gasolina parecía irse acabando paulatinamente, y la Gramanet comenzó a retomar el mando del partido, acercándose con criterio a las inmediaciones de la portería local. Con el mediocampo exhausto, la defensa local se mostró por fin muy segura, con Juan Carlos, Alfred, Socías y Javi González, rindiendo a gran nivel.

Un penalti reclamado sobre Sanou (que acabó viendo tarjeta cuando el forcejeo -fuera penalti o no- existió), y un gol anulado a "Caperucho" por fuera de juego (probablemente bien anulado), avisaban que el Gavà aún tenía algo que decir. A la Grama, que venía convencida de llevarse los tres puntos, sorprendentemente le pudieron los nervios, y algún jugador como el "Chino" Expósito y sobretodo Pedro García, se mostraron especialmente alterados (siguiendo el ejemplo de su entrenador, Pep Rovira). De hecho el delantero colomense escupió flagrantemente en la cara de Javi González aprovechando que el juego estaba interrumpido, no siendo observado ni por linier ni por colegiado.

Y si los jugadores de la Grama estaban nerviosos, más lo estuvieron cuando en una jugada confusa, fruto del empuje y del coraje de los jugadores gavanenses, Dani Guerrero (quien por cierto salió de la cantera colomense) acertaba a enviar el balón al fondo de la red. 2-1, tremenda alegría de los jugadores, y delirio en las rebosantes gradas de la Bóbila, que gracias a la presentación del fútbol base (no se puede hacer una presentación cada semana?) ofrecía un aspecto inmejorable.

Eran ya instantes de descuento de un partido que el colegiado Pinto Herrera (que mostró muy poca personalidad) alargó durante 7 minutos, y en los que además de un par de balones colgados al área el árbitro se ahorró tarjetas para el guardameta Miguel Ramos y algún colomense más. Al final del partido, el alborozo general se vio empañado por la actuación de algunos jugadores visitantes, que no supieron aceptar la derrota. En particular, triste la actuación de Pedro García, Aarón, y nuevamente de Expósito, que en la misma puerta del túnel de vestuarios agarró y amenazó a Javi González, quien parece ser habría golpeado anteriormente a un jugador de la Grama.

Gavà: Marcos, Juan Carlos, Alfred, Socías, Javi González, José Alberto (Sanou 73'), Céspedes, Serramitja, Quino (Eric 81'), Manteca (Patri 94'), Dani Guerrero.

Gramanet: Miguel Ramos, Toni Lao, Jorge, Rezzonico, Canelada, Raúl Rodríguez, Joaquín, Alfaro (Carlitos 83'), Expósito (Eloi Gila 79'), Pedro García, Aarón.

Goles: 1-0 Rezzonico -pp- (10'), 1-1 Rezzonico (45+3'), 2-1 Dani Guerrero (91').

Ojalá este partido sea el punto de arranque de una recuperación que no se podía demorar más, pero aunque no lo sea, hay que agradecer a los jugadores la forma en que se dejan la piel sobre el campo y celebrar la merecidísima primera victoria de la temporada y el abandono del farolillo rojo, quedando la permanencia a 5 puntos.

A la espera de si el comité sanciona a Javi González (el árbitro recogió en el acta la presunta agresión pero no la provocación previa), el Gavà perderá para la semana que viene el importante partido ante el Espanyol B a Alfred, quien vio su quinta cartulina amarilla de la temporada.