Puede que no sea el portero con la mejor planta de la categoría, pero creo que ningún aficionado de La Bòbila lo hubiera cambiado por otro estas dos fantásticas temporadas. Sus paradas, su juego de pies para sacar el balón, su liderazgo desde la portería, no son tan fácilmente cuantificables como una asistencia o un gol, pero con sus actuaciones, a veces bordeando lo milagroso, Albert Sancho le ha dado seguridad y muchos puntos al Gavà.
Llegó sin hacer ruido en verano de 2018. Formado en el futbol base de la EF Gavà aterrizaba en La Bòbila con una corta experiencia en el Vista Alegre en 1ªCatalana y un año en blanco, sin equipo. Kilian y una lesión le barraron el paso en la primera vuelta, pero en la segunda se volvió insustituible a base de paradones. Esta pasada temporada llegó Romero para disputarle la titularidad, pero tras una rotación en las primeras jornadas de liga ya nada le apartó de la portería, en la que llegó a acumular 335 minutos sin encajar un gol (desde el 19 de mayo hasta el 5 de Octubre). En el cómputo global, ha defendido la meta gavanense en 41 partidos de liga (57 incluyendo amistosos) en los que ha encajado 48 goles.
Albert dará este año prioridad a otros aspectos de su vida, pero quién sabe qué deparará el futuro para un portero de la casa que deja un gran recuerdo en La Bòbila.
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